UN DÍA. ALGUNO

Tenía que suceder algún día. Tarde o temprano. Tarde
O temprano.
Y yo que había creído en casi todo lo escuchado.
Eso pasa cuando pegas la oreja en la pared y captas mitades. Las que más te convengan. O las que menos. Más
O menos.
Sí o sí iba a pasar tal como pasó. Sí
O sí.
Lo bueno de ser ágil: que te salís de las incomodidades con estilo. De una manera u otra. De esa manera
U otra.
Yo escuché que le decía a mi hermano: "No me vengas con cosas raras, que para raros está tu tío"
Y corrí a buscar al tío.
Pero claro, no era que "estaba, estaba". Era que el tío es raro. Que para raros, está el tío.

Esta linealidad un día va a terminar por matarme.