Wednesday, July 13, 2005

ULTRA

Si tuviera mucha mucha muchísima plata, pero a ver, millones y millones de dólares. Como mil millones de dólares, pondría un restaurante que no sería tal sino "Restó, Bistró" ultra recontra pro. Onda, el más pro de todos. Carííííiííííísimo, elitista, asquerosamente snob. Sería chiquito, exclusivo y situado en el mejor lugar de la ciudad. Gastaría fortunas en publicidad. Y solo anunciaría en los medios más top.
Tendría menúes increíbles que la gente desearía llevarSe para enmarcar y poner en la pared del living. Los cubiertos pesarían más que mi hija.

Entonces, claro, se llenaría de gente muy pero muy fea. Viejas estiradas, que seguro eran más lindas antes de operarse, viejos verdes con mucho diente a la vista (más que nada del maxilar inferior), modelitos anoréxicas con sus novios de turno. Actores de la calaña de Juan Cruz Bordeu por ejemplo. A lo mejor un día vendría hasta Tinelli con sus hijas armatoste. Bartolomé Mitre con Nequi Galotti también. Y todos estarían alucinados apenas cruzaran la puerta.

Entonces ponele una noche Graciela Borges pediría "pechitos de pollo sobre crocante de baby verdes, bañado en culí de frutos de Ecuador". Y luego de 45 minutos le llegaría una pechuga de pollo recién comprada en rapipollo, con lechuga y banana. (alguna objeción? estoy engañando? ni un poco)

Otra noche, Pía Slpktkpqckta con su marido Paul pedirían un cafecito con petit foeurs y les llegaría un exquisito café con una masita de parmesano.

Beberages: gaseosa: Bidú cola
agua: de sifón (y les llevaría el sifón a la mesa)

Y así.

Qué placer. Cómo me reiría.