Wednesday, May 11, 2005

FREAKLAND

Se superan. Día a día.
Cuando cada mañana saco Retiro ida y vuelta siento la ironía en el tuétano.
Percibo la mirada penetrante del boletero, la carcajadita de la máquina expendedora.
Noto claramente cómo me miran los guardas, conteniendo el comentario sarcástico.
Igual yo sigo como si nada.
Saludo al del puesto de diarios, me presta el diario hasta que llega el tren. Y eso.
Siempre, todos los días, hay alguna anecdotita digna de mención.
Pero ayer, en media hora de viaje:

*Pasa el "panchero", una mujer le compra. Come medio pancho y la otra mitad la guarda, EN LA CARTERA. Así nomás como venía, sin servilleta siquiera.

*Una niñita (el género claramente definido por aritos, trencitas y vestido) en el asiento inmediatamente delante del mío. Se para. Su madre enuncia: "Bajate papito, sentate bien"

*Llegando a la estación en la que desciendo, me voy acercando a la puerta (crowded el tren). Una mujer abultadota obstaculiza el camino. Educada como soy:
Loli:-Baja en la que viene?
Mujer Abultadota:-Sí, bajo en Olivos
L:-No, pero la que viene es Vicente López
MA:-Por eso.
????


El tren es una viaje de ida.
No me jodan.