"YOSOYDELASQUE"

Hablando con M, hace un tiempo, llegamos a la conclusión de que ambas detestamos el discursito ególatra camuflado.
Eso de andar despreciando públicamente las propias virtudes, solo para obtener por parte del interlocutor algún "No, qué decís, si estás divina!", o sus equivalentes.
El otro día, por ejemplo, en el Mancini de mujer del Unicenter: estaba yo probándome no se qué, con la Burli dentro del probador, haciendo pasos de baile y esas cosas.
La vendedora, rubia, bonita, naricita apenas perceptible, maquillada en tonos apenas perceptibles, con un cuerpito lleno de curvas apenas percetibles, vestida toda de negro, con una inscripción en strass en su remera, apenas percetible. Y UNOS BUCLES!, UNOS BUCLES PERFECTOS, ARMADÍSIMOS. RIZOS QUE NO HABÍAN ESCATIMANDO EN CREMA PANTENE PRO-V PARA CABESHO ENRULADO. UN RESORTAJE. UNA COSA DE LOCOS.
Se asoma al probador para comprobar que obvio, te queda enorme, y de paso se mira en el espejo, hablándose a sí misma con la mirada y enuncia "Ay! ya no se qué hacer con estos rulos. Te juro, los odio" mientras se los masajeaba con movimientos que bien podrían haberse tomado como mastubatorios.

Decí que no converso mucho con extraños, porque sino te juro que le contestaba. Le contestaba y la dejaba chiquititittitita frente al espejito, con sus rulitos, apenas perceptibles.