Monday, March 14, 2005

DE LUNES, DE PARTO

Se conoce mi enorme magnetismo con los vicios.
De chica, con un amplio e inusitado (dada la escasa edad) auto- control, supe no caer en:
- drogas
- alcohol
- sexo desmesurado
- tabaco

En cambio, tuve mi etapa (oppppppfffffffiooooo) de anorexia nerviosa. Un poco precoz, sí. No solo porque los años que me separaban con el día de mi nacimiento eran pocos, sino porque yo tenía 13 en 1989. Y por esas épocas, no estaba de moda ser anoréxica.

2 años después, decidí que era más sano fumarse un paquete de Marlboros y comerse un asado de vez en cuando. Sucumbí. Y claro está: como no podía ser de otra manera, en una semana estaba fumándome 1 paquete diario, mínimo, haciendo argollitas con el humo, toda la bola.

A los 18 antes de quedar embarazada me auto-juré que a los 19 iba a probar todo lo que se me ocurriera (lo de "19" no fue caprichoso. Es que tenía que esperar al verano). Pero quedé embarazada y el descontrol planificado volvió a aplazarse.

Bueno, ya pasaron 9 años.
QUÉ BAJO CAÍ!
Podría ya ir pensando en dejar de:

- gastar plata en ropa.
- comer mierdas todo el día.
- tomar litros de coca cola.
- maldecir dos de cada tres palabras.
- comer la parte de adentro de mi boca compulsivamente.
- seguir esperando que llegue el día, me mida, y el centímetro me devuelva 5 cm más de alto y 15 más de ancho.
- Y los otros, esos que no puedo enumerar (mis padres visitan esta página, ocasionalmente)

PERO NO MUCHO MÁS, EH?


Igual, estoy encontrando coincidencias con el mundo exterior que explican muchos de los acontecimientos que tenía sin ubicar en la linea cronológica de mi vida.